Muchos artistas responden al mundo que les rodea. Pero para unos pocos, el mundo responde ante ellos. Zumi Rosow es una de ellos. Músico, diseñadora, musa y embajadora mundial de la inspiradora franja que hace de la escena artística, musical y de la moda de Los Ángeles la más dinámica de Estados Unidos. Se siente a sus anchas tocando el saxofón, sobre el escenario con cualquiera de sus colaboraciones musicales (Black Lips, Crush), desfilando para Gucci en París o creando joyas y música en su estudio casero a las afueras de Hollywood, en Los Ángeles. Con su estilo único, Zumi, nacida en Los Ángeles, canaliza las distintas épocas de la escena musical de la ciudad, desde la psicodelia ácida hasta el punk de cuero y cadenas, pasando por el glam de Hollywood. El resultado es ser ella misma.

La estética de Zumi se traslada a su casa. Los visitantes de su casa artesanal de dos plantas se encuentran con una bola de discoteca colgada sobre el porche, un tótem para el viaje a su espacio íntimo, donde compone música, diseña y fabrica sus joyas características y busca la inspiración que se refleja en su look. Sus influencias se remontan a su infancia al otro lado de la ciudad, cerca del Pacífico, donde sus padres la expusieron a sus inquietudes artísticas filtradas por el sol de California. Comparte su casa actual con su socio y colaborador Cole Alexander, un elenco de otros creativos y, quizá lo más importante, un gato callejero que Zumi descubrió perdido y rebautizó como "Colmillo". Como a tantas cosas bonitas y especiales, le dio la bienvenida a su hogar.

Cueva felina mágica.

A todos aquí nos gustan las plantas, y el estilo bungalow californiano de los años setenta tiene una gran influencia. Habiendo crecido en el Cañón de Santa Mónica, esa fue definitivamente la estética con la que crecí. Me encantan la arquitectura española y las cosas marroquíes porque estuve allí de niña.

A menudo, empezamos grabando un ritmo de batería con un tom de suelo y colocando un micrófono debajo de un tambor. Grabamos un ritmo en un cuatro pistas y partimos de ahí. Pero no es algo que sigamos siempre.

Está totalmente desorganizada. Ahora estoy intentando organizarla porque hay un montón de discos que no están en sus fundas correspondientes. Después quiero organizarla mejor, para que las cosas estén en secciones. Gran parte de mi colección de discos es de mi padre y mis abuelos, que tenían muy buen gusto. Tengo suerte. Todos los vinilos que tenía se subastaron cuando se subastó mi espacio de almacenamiento, así que perdí toda mi colección de vinilos.

La sierra me la regaló mi ex novio, que está en una banda maravillosa llamada Dallas Acid. Un día estábamos escuchando la radio y oí este sonido, y pensé en cómo quería utilizarlo en parte de mi música. Nadie toca realmente la sierra. ¡Soñaba con ello y me regaló una sierra por mi cumpleaños!

Probablemente mi cama. En mi cama, con mi gato y mi novio viendo películas chulas, es como un lugar de ensueño. También me encanta mi estudio. Cuando entra la luz a una hora determinada del día, es muy agradable. La luz es muy agradable en casa.

Lo primero que hago es buscar a Colmillo. Siempre viene corriendo hacia nosotros maullando. Volver a casa con él es como volver a casa con tu hijo. Luego evalúo la situación de la casa, veo qué tipo de acción ha habido, ya que vivo con diferentes personas. A menudo... han estado pasando cosas, la evolución de nuevas plantas, o la reorganización del equipamiento de la casa. Si ha habido una fiesta, o se ha estado practicando para espectáculos en curso. Supongo que luego me tumbo en la cama, me relajo, respiro y absorbo la agradable sensación de estar de vuelta en casa.

Hay un tapiz egipcio precioso que nos compró uno de nuestros fans. Es de los años veinte. Está colgado en mi habitación. Siempre he estado obsesionada con la egiptología y todo lo egipcio desde que era pequeña. Me regalaron unos sellos con jeroglíficos cuando tenía ocho años y me enamoré de ellos. Es algo que representa mi gusto personal. En cuanto a mi sentido del estilo, me encanta coleccionar objetos antiguos.

A Colmillo.