Ahora que la marca producía hasta 200 amplificadores al día, también se imponía una celebración más grandiosa. Con la ayuda de miembros de poderosos grupos de rock como Iron Maiden, Slipknot, Slayer y The Cult, además de legendarios guitarristas como Yngwie Malmsteen y Joe Satriani, Marshall tomó el Wembley Arena de Londres en septiembre de 2012 para conmemorar un hito increíble.

"Esta es verdaderamente la celebración de un icono británico", dijo el batería de Iron Maiden y maestro de ceremonias Nicko McBrain antes del evento. "Jim Marshall y el equipo han dado forma al sonido de la música rock para la eternidad... así que estamos reuniendo a artistas más allá de la leyenda para un momento de la historia. Esperad pura locura de rock 'n' roll amplificada al máximo por Marshall".

La celebración fue todo un éxito. Un collage de tres horas de temas históricos de metal, blues y rock clásico -desde 'Ace of Spades' de Motorhead hasta 'Rock Me Baby' de BB King- atronaron en directo desde las paredes de pilas Marshall ante una audiencia de miles de personas. La promesa de "sonido a tope" que figuraba en los avisos esparcidos por el recinto se cumplió sin lugar a dudas.

Lamentablemente, el evento también acabaría siendo un homenaje al hombre que lo empezó todo. Jim Marshall falleció en abril de ese mismo año, el mismo día que su admirador Kurt Cobain, 18 años antes. Jim, un adicto al trabajo hasta la médula, seguía trabajando turnos de 10 horas hasta bien entrados los 80 años. No fue hasta que su salud se resintió cuando se permitió realmente apartarse del negocio.

Una década después del fallecimiento de nuestro fundador, la memoria de Jim sigue viva en nuestro trabajo, sobre todo a través de su compromiso con la calidad, su atención al detalle y su icónica marca manuscrita que aún hoy adorna tantos amplificadores Marshall.